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Pérdida auditiva - causas

Causas de la pérdida auditiva y la sordera

Desde la Organización Mundial de la Salud se emiten recomendaciones acerca de los asuntos relacionados con la pérdida auditiva para trabajar desde la concienciación y la prevención. A continuación vamos a indicar las causas que desde la OMS indican.

La mayoría de los casos de pérdida auditiva pueden ser tratadas y, si se detectan a tiempo, suelen tener fácil tratamiento. El gasto en trabajar desde la prevención es reducido comparado con hacerlo cuando ya es demasiado tarde.

Causas de pérdida auditiva: congénitas y adquiridas

Causas congénitas
Las causas congénitas pueden determinar la pérdida de audición en el momento del nacimiento o poco después. La pérdida de audición puede obedecer a factores hereditarios y no hereditarios, o a complicaciones durante el embarazo y el parto, entre ellas:

  • rubéola materna, sífilis u otras infecciones durante el embarazo;
  • bajo peso al nacer;
  • asfixia del parto (falta de oxígeno en el momento del parto);
  • uso inadecuado de ciertos medicamentos como aminoglucósidos, medicamentos citotóxicos, antipalúdicos y diuréticos;
  • ictericia grave durante el período neonatal, que puede lesionar el nervio auditivo del recién nacido.

Causas adquiridas
Las causas adquiridas pueden provocar la pérdida de audición a cualquier edad.

  • algunas enfermedades infecciosas, como la meningitis, el sarampión y la parotiditis;
  • la infección crónica del oído;
  • la presencia de líquido en el oído (otitis media);
  • el uso de algunos medicamentos, como los empleados para tratar las infecciones neonatales, el paludismo, la tuberculosis farmacorresistente y distintos tipos de cáncer;
  • los traumatismos craneoencefálicos o de los oídos;
  • la exposición al ruido excesivo, por ejemplo en entornos laborales en los que se trabaja con maquinaria ruidosa o se producen explosiones;
  • la exposición a sonidos muy elevados durante actividades recreativas, como el uso de aparatos de audio personales a un volumen elevado durante períodos prolongados de tiempo, o en bares, discotecas, conciertos y acontecimientos deportivos;
  • el envejecimiento, en concreto la degeneración de las células sensoriales; y
  • la obstrucción del conducto auditivo producida por cerumen o cuerpos extraños.
  • En los niños, la otitis media crónica es una causa común de pérdida de audición.

Información de la OMS