Higiene
Prevenir antes de curar
HIGIENE
El principal objetivo es reeducar sobre los malos hábitos adquiridos desde la infancia, intentando corregirlos a través de una información precisa y adecuada para prevenir daños innecesarios. Las cifras son esclarecedoras de la evolución de las patologías auditivas: el 50% de los españoles ha sufrido tapones en los oídos en alguna ocasión, y cerca de un millón y medio padece problemas auditivos de forma regular.
A continuación, detallamos los puntos principales:
-
Limpiar los oídos
Por fuera aseándose con agua y jabón secándolos con una toalla, es un método aconsejado e inofensivo, ya que consigue el secado externo del oído y la higiene estética. -
No presionar la cera hacia dentro, ni introducir útiles punzantes.
No es aconsejable introducir uñas, bolígrafos, horquillas, con ello sólo se consigue introducir suciedad, provocar infecciones y presionar la cera hacia el interior. Son los métodos más utilizados por los españoles para limpiarse los oídos junto con los bastoncillos, a pesar de los riesgos que pueden desentrañar para la salud. -
No utilizar nunca los bastoncillos de algodón.
Si usa los clásicos bastoncillos, debe saber que los médicos lo desaconsejan rotundamente, porque lo que consigue es compactar e introducir el cerumen hacia el fondo del oído externo y es más difícil su extracción. Son nuestro mayor enemigo a la hora de provocar ciertas patologías auditivas, llegando a producir pérdidas de audición, heridas, infecciones y perforaciones. Solamente se aconseja la utilización para la limpieza del pabellón auditivo en aquellos recovecos como el Hélix cuando la limpieza de este se dificulta con una toalla y como mucho la entrada del conducto auditivo sin profundizar al interior.
Paradójicamente, el 74% de la población sabe que los bastoncillos pueden contribuir a la aparición de problemas de oídos. Sin embargo el 93% de los españoles siguen utilizando bastoncillos para la higiene del oído por costumbre o por desconocimiento de otras alternativas. -
El mejor momento para la higiene es durante la ducha o el baño.
Es el mejor momento, ya que tenemos la piel húmeda y es más fácil retirar el cerumen. El líquido debe permanecer de 1 a 2 minutos dentro del oído, manteniendo la cabeza inclinada, para después incorporarla a su posición normal, de manera que fluya el agua templada, la cual trae consigo la cerilla reblandecida que se absorbe con algodón. Es un procedimiento rápido que a la larga nos ahorra tiempo y complicaciones. -
La periodicidad de lahigiene del oído debe ser en días alternos.
Lo mejor es dejar 2 o 3 días entre cada limpieza. Un término medio que no permita acumular un exceso de cera en nuestros oídos para evitar la pérdida de audición, sufrir taponamiento, molestias, ruidos, mareos y vértigos o picor en el oído. Pero que al mismo tiempo, mantenga un mínimo de cera natural que proteja nuestros oídos, como por ejemplo evitando la entrada de sustancias del exterior. -
Utilizar agua marina, bañarse en el mar.
Entre las ventajas del agua de mar destacamos su carácter natural, es isotónico, estéril, sin conservantes para evitar alergias, sin gases propelentes, rico en bicarbonatos que favorece a la disgregación del cerumen y contiene minerales y oligoelementos que disuelven los ácidos grasos. -
Aumentar la precaución en bebés para evitar las otitis.
Más del 80% de los niños menores de 3 años ha sufrido alguna vez una otitis (inflamación del oído medio), convirtiéndose es la segunda causa de consulta más frecuente en los niños. Es uno de los colectivos, junto con los ancianos más afectados. Desde los 6 meses de edad ya pueden utilizar los difusores de agua de mar para prevenir estos casos, ayúdele a tener una buena higiene nasal y auditiva: hacer lavados con el agua marina ayuda, a largo y corto plazo, a prevenir las otitis. -
Evitar el uso continuado de auriculares y otros aparatos externos.
Los auriculares de reproductores mp3, manos libres o tampones aislantes de agua y ruido, favorecen la producción de cerumen, introducen residuos y suciedad que van agrandando el tapón de cera, además de producir infecciones y pérdidas de audición. Hoy en día, es una de las causas favorecedora de estas patologías y está en continuo crecimiento, la generación mp3 acabará pasando factura para la salud auditiva. -
Acudir al especialista al menos una vez al año.
Si tiene tendencia a la formación de tapones o desarrollar patologías auditivas debe acudir a un especialista más asiduamente. Entre las personas más afectadas se encuentran: aquellas personas que debido simplemente a la genética son más propensas a producir tapones de cera, además de los hombres (al contar con más pelo en el conducto), los niños, las personas mayores, los nadadores o las expuestas a ambientes con mucha polución o ruido, la generación mp3, etc.
Se recomienda acudir al otorrino una vez al año o hacer caso de las recomendaciones de profesionales como los farmacéuticos para su higiene y prevención. El otorrino aparece en escena demasiado tarde, cuando ya hay algún problema auditivo, otitis o tapones de cerumen, entre las patologías menores.